Mi libertad es como la del cordero que por el mero hecho de poderse mover por dentro de la granja cree que es libre. Siento como si las pasiones como la rabia, el miedo o la soledad formasen parte de mi cuerpo,como si fuesen organicas. Como si un dia, atras en el tiempo, esos mismos pensamientos hubieran pasado a formar parte de mi cuerpo, y ahora irremediablemente(a menos que haga algo) determinan mis actos. Son como las paredes de la granja,me impiden ver mas alla y percibir el autentico paisaje de la libertad.Es la ignorancia de estas paredes lo que provoca que repita mi vida en patrones previsibles. He de conocerme a mi mismo, tengo que saber como actuan estas pasiones y de que forma determinan mis actos y limitan mi libertad.
uff cuanto trabajo...mejor empiezo mañana.
Tu libertad comenzó en el mismo instante que tomaste la decisión de marcharte.
ResponderEliminarAhora solo tengo que seguir desde el exilo tus aventuras...